La gata de pelaje negro

Hace ya algún tiempo que vengo observando a una gatita hermosa de cabellera negra. Animal intrigante y lejano. Sus historias y personalidad felina me están volviendo loco. Ciertamente no nos vemos muy seguido pero cuando la veo caminar sobre el techo de la casa rosada no puedo evitar perderme en su figura.

Como macho alfa yo mismo hago mis despliegues histrionicos y luzco mi desaliñadao pelaje con particular orgullo y seguridad (eso mata a las gatitas), dejo mi olor por aqui y por allá esperando que este animal magnífico se extravíe en su pensamiento y que de esta forma yo pueda entrar a su cabeza. Todavía no estoy seguro que parasá con esta gatita. Ronrroneos, sudor, risas, buenos momentos y una tranquilidad extraña rodean nuestros encuentros, eso hace brillar mis bigotes.

Nuestros encuentros son peligrosos para la gente de este mundo, cuando nos estamos tomando por el cuello y recorriendonos suavemente, no tardan en desencadenarse una serie de fenómenos nefastos que involucran muerte y sangre a nuestro aldedor, puede sonar tenebroso, pero los gritos y las sirenas son un buena banda sonora en medio del sexo, al menos da una curiosa conversación cuando estamos panza arriba.

Hoy quiero buscarla, gritarle, besarla.